Ir al contenido principal

PINTURA Y ACTIVISMO SOCIAL

Cada vez que empieza el curso ocurre lo mismo: el alumnado permanece en esa eterna edad pequeña y yo he dado una zancada más hacia la oscuridad. Un dolorcito nuevo, una dioptría más, el avance de las canas, tres visitas médicas programadas en el ambulatorio, otra carta para la detección precoz del cáncer de colon.

No pienso en el futuro ya que no sabría qué pensar y además me da miedo. No tengo plan de pensiones ni seguro de defunción. Pero de un tiempo a esta parte me fijo más en los jubilados, es decir, en sus ocupaciones tras la desocupación. Y entonces me pregunto: si llego ¿qué haré con mi tiempo? Cuando uno llega a un lugar nuevo lo primero que debe hacer es callar y observar. Siempre lo he hecho así, no me ha ido mal. Observo pues a los jubilados que practican hobbys y descubro uno muy común: el activismo social. Me parece muy bien, lo apunto. Debe ser placentero dedicarse a molestar al sistema cuando el sistema ya no te tiene agarrado por el pescuezo, hay algo poético y bello en esta actitud.

Sin quererlo, y sin pensar en el futuro, empiezo a maquinar un activismo que pase cuentas con las pesadillas que me han molestado, empezando por el nacionalismo y las derechas catalanas, que han sido mi principal fastidio. Crearé algún foro, alguna publicación que, despiadada y sarcástica, moleste a los señoritos de la derecha nacionalista. Para no ser acusado de nada, procuraré que también moleste a las señoritas de la derecha: que se vayan preparando Elsa Artadi, Laura Borràs y Pilar Rahola. También me buscaré un voluntariado en el asunto educativo, más que nada para criticar a las autoridades educativas, igual me propongo carcomer la inmersión lingüística y el delirio monolingüe. Durante la pandemia ya hice mis pinitos, con una colección de vídeos dando la chapa sobre escritores catalanes que no fue mal del todo y conseguí molestar a más de uno/a: mi colección de escritores catalanes reseñados eran todos los escritores (o escritoras) que, habiendo nacido en Cataluña, escribieron en castellano. 

Ver a un adorable jubilado hablando en castellano con acento catalán y reseñando a escritores muertos será enternecedor, lo auguro.

Me pongo a repasar la lista de personas, ideologías, instituciones y políticas que me han cabreado y la lista crece y crece sin parar. Me asombro a mi mismo de mi capacidad de convivencia pacífica en este mundo, en este paisito. Me siento como un Hamlet maduro que ha abandonado el castillo para instalarse en un pisito en provincias pero que, sin embargo, mantiene muy viva su sed de venganza fría, cruel y horrible. Hace unos pocos años me sugirieron el argumento de una novela: un club de jubilados que se dedican al asesinato colaborativo de todas aquellas personas que les han dado mala vida cuando eran jóvenes. Es una idea fenomenal.

Aparte de todo esto, también me pondré a pintar y alquilaré un cuartucho cochambroso y bohemio para poner mi caballete. Siempre quise ser pintor.

En 1999 me hice un autorretrato vestido de torero.





Comentarios

  1. Sí que tienes que sufrir,queriendo ser malo.Resulta que no lo consigues. Más que torero,pareces un picador que no pudo llegar,eso nos pasa a muchos.
    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Lo más probable es que acabes NO haciendo nada de lo que ahora estás pensando. Eso sí, nadie podrá quitarte tu derecho al pataleo que algunos llaman "activismo social"

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El derecho al pataleo ¿está reconocido en los derechos humanos?

      Eliminar
    2. Pues es una buena pregunta. Sí, porque al menos a mí, no me queda muy claro si el pataleo tiene que ver con el derecho numerado como 19 y que habla de la libertad de expresión. Es como para pensarlo detenidamente.

      Eliminar
  3. jejejeje...hermano....primero has de llegar.
    Un abrazote

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

L'HOSPITALET DE LLOBREGAT SEGONS GARCÍA LÓPEZ O SEGONS ARDÈVOL MALLOL

Ens imaginarem dues reporteres a les quals se'ls encomana fer un treball periodístic sobre les llengües que es parlen en un territori concret. Posem per cas l'Hospitalet de Llobregat. Una de les dues reporteres es diu Pilar García López; l'altra, Laia Ardèvol i Mallol. La Pilar fa un retrat assèptic i objectiu del cas, se n'adona que la major part de la població parla en llengua castellana i afegeix que les persones immigrades s'apunten a la llengua castellana un cop han arribat al territori. Acompanya el reportatge amb dades sobre pobresa, renda per càpita, i etc: la conclusió no hi és, però el lector descobreix que la llengua té una relació directa amb el nivell econòmic. Dit d'una altra manera: la llengua castellana és la llengua de la classe baixa. La Laia Ardèvol no vol dir que la llengua castellana és la que parla la classe baixa, perquè la seva tesi (prèvia) és que la llengua castellana l'imposa un classe poderosa i dominant. La Laia Ardèvol també s...

GIL JOURDAN SUSPIRA

Gil Jourdan es un detective serio y delgado, más bien antipático y arrogante. Su ayudante, Libélula, un dipsomaníaco torpe, antiguo delincuente de poca monta, el responsable de las escenas cómicas. Les conocí hace muchísimos años, cuando leía por fascículos quincenales sus aventuras en la revista infantil Cavall Fort. Ahí descubrí el género policial, provisto de un cierto humor negro y sarcástico. Un género policial que se mezclaba con el de las aventuras, las sombras, los ricos malvados y avariciosos, los pringados de clase baja que trabajan para los ricos, los bajos fondos, las muertes intrigantes. Aquéllos cómics, que para mi entonces eran tebeos no solo forman parte de mi educación literaria si no también de la estética y, en cierto sentido, de la sentimental. La revista Cavall Fort publicó varios álbumes de Gil Jourdan bajo el nombre de Gil Pupil·la: Albert Jané, el fundador, director y traductor de la revista concebía el oficio de la traducción como una labor apostólica de la cos...

10 AÑOS DE "CRÓNICA GLOBAL"

Este pasado mes de octubre se cumplieron 8 años del dislate: el referéndum, las manifestaciones, los contenedores quemados, la batallita de Urquinaona, las amenazas, ho tornarem a fer, los insultos. Ocho años del instante que más puso en riesgo eso tan delicado que es la convivencia en una sociedad compleja, quizás acomplejada, diversa y líquida. Alguien decidió que podía arriesgarlo todo por un sueño medieval y trasnochado, para un viaje alocado e insano y para el cual, por cierto, no habían previsto las alforjas ni reparado en gastos, ni calculado consecuencias. El acto de violencia de un niño malcriado y consentido. La culminación del proyecto en el referéndum del 1 de octubre de 2017 es un acto pueril y grotesco promovido por unos políticos irresponsables y embravecidos que jugaron con las emociones más bajas de la ciudadanía, ese cuerpo social al que ellos llamaron "pueblo catalán" en una clara alusión a una etapa predemocrática y para despertarles el ardor medieval, el ...